Ser tres... (SPOILER: Threesome, explicito... NC-17)

La inauguración de la Disco... La musica estridente... la pista llena... Decenas de gente bailando y bebiendo y yo buscándolo con la mirada << ¿Dónde estás kinney? ¿volveremos a jugar al gato y al ratón? >> finalmente lo ví en la parte de arriba, divirtiéndose de lo lindo con un par de chicas. Alcé mi mano para que pudiese localizarme entre la multitud y cuando me miró le hice una seña con la cabeza para que bajara, no hubo necesidad de decir más... Ambos sabíamos lo que queríamos. Yo me acomodé cerca de las escaleras por donde el bajaría, mientras le quitaba una copa al mesero de turno y la bebía de un sólo trago.

-Vaya Reth, que sorpresa, me alegra que hayas decidido venir, por cierto te ves muy guapo en ese atuendo.

-Digno de la ocasión Brian, no podía dejar de pasar por alto la inauguración - contesté mientras me tomaba por la camisa y me dejaba llevar hasta la barra de bebidas, donde pidió un par de tragos - Me gusta - dije refiriéndome a la disco - Bien planeada, bien organizada y en un buen lugar, te auguro un rotundo éxito como en todo lo que haces... Eres algo así como el rey midas del siglo XXI, todo lo que tocas, lo conviertes en oro.

Brian tomó las bebidas y nos levantamos para tomar asiento en una de las mesas contiguas. ¿Cómo has estado? preguntó mientras le ayudaba a prender su cigarrillo - Me la he pasado viajando todo el tiempo, ya sabes que no puedo estar quieto en un mismo lado todo el tiempo, pero... Ya sabes, por los buenos amigos se hace hasta lo imposible - le devolví el guiño. Vi que Brian desvió su mirada hacia la barra. Había una chica rubia, muy sexy que no nos depegaba la vista-

-¿Te imaginas?

-Conozco esa mirada Kinney... y - me rei - Por supuesto que me estoy imaginando, a mi no me importaría perderme en ese par de.. curvas.

-Así que por el momento te conformas - me puse a su izquierda y le acaricié un rulo que se había salido de lugar y se lo coloqué detrás de su oreja- Brian y yo podemos hacer que esa actitud cambie... Una mujer como tú, no debería aburrirse, al contrario... - tomé su copa y bebí de ella , la regresé a su mano sonriéndole de una manera sensual.

-No seas tímida.

Paseaba por la ciudad sin rumbo fijo asi que entre a una disco, Kate no pudo acompañarme asi que entre sola, me acerque a la barra y pedi un trago, Margarita blue, vi a dos chicos muy apuestos sentados en una mesa cercana, no podia dejar de mirarlos, por un momento crei que ellos me miraban tambien, de un momento a otro se levantaron, venian hacia la barra por desgracia mia otra rubia habia captado su atencion. deje mi trago en la barra uno de ellos tomo el vaso de la otra chica y bebio de el yo sabia lo que significaba eso, preferi no ver la escena y me pare a bailar con la multitud, los vi entrar a un cuarto en el segundo piso me dieron ganas de gritar paero segui bailando , aun habia oportunidad....

Todo iba a la perfección, todo pintaba para ser una noche realmente inolvidable, la rubia exhuberante había accedido a acompañarnos al privado, pero algo ocurrió... Una llamada de celular cambió todo. Ella parecía algo afectada y discutía con alguien, mencionando el nombre de Emmett. Brian y yo intercambiamos miradas cómplices... Después ella cambió su manera de hablar con ese sujeto y nos dimos cuenta de que la chica tenía compromiso, eso ya cambiaba las cosas y nos planteaba otras tantas. Me acerqué a Brian y le susurré al oído:

-Es una chica casada... Creo que deberíamos dejarla ir.

Pero no fue necesario ella, tomó la iniciativa, tomó sus cosas y se disculpó con nosotros; finalmente cerró la puerta y nos dejó solos.

-Bien... yo de todos modos quiero pasarla bien Kinney.

Volvimos a ver la parte baja de la discoteca, através de las paredes de cristal, buscando una chica... y había una.

Segui bailando con la idea de resignacion pasando por mi mente una y otra vez cuando repentinamente vi salir a la otra chika a toda prisa del lugar de inmediato voltee hacia arriba y ahi estaban viendome fijamente desde la ventana, mi corazon comenzo a latir tan rapido que hubiera sido imposible detenerlo, unos guardias del lugar me pidieron acompañarlos , me guiaron a travez de la gente hacia las escaleras donde uno de ellos estaba esperandome y tendiendome a mano me invito a pasar .....

El equipo de seguridad pronto hizo su trabajo y la otra chica rubia entró por la puerta muy segura de si misma, eso era muy buena señal << genial >> pensé. Brian la abordó de inmediato y le ofreció la champaña, yo me serví otra copa sin dejar de mirarla de arriba abajo descaradamente.

-Y dinos , preciosa ¿tienes algún nombre? o eso sale sobrando -le dije.

Me acerqué por detrás y le dije algunas cosas al oído que sólo ella pudo escuchar pero ella se puso algo nerviosa al momento y eso me hizo sentir más... salvaje.

me ofrecieron champaña, la tome, sin esperar demasiado uno de ellos se dirigio a mi diciendo

-Y dinos , preciosa ¿tienes algún nombre? o eso sale sobrando
-Mikaella- respondi rapidamente

y despues de un pequeño sorbo a la fina copa que tenia entre mis manos añadi con una mirada pikara :

-Mika para mis... amigos

el me rodeo y susurrandome al oido me dijo:

-y dime chica quieres divertirte esta noche

me sonrroje y al instante no supe que responder, voltee mi rostro un poko de tal manera que pudiera ver el suyo, con mi mano rosando su mejilla pregunte:

-de que tipo de diversion estamos hablando chiko lindo ?

-de que tipo de diversion estamos hablando chiko lindo ?

-De un tipo de diversión mas allá de tu imaginación - la rodeé por la cintura con mis brazos - Esta noche va a ser la mejor de toda tu vida y créeme cuando te lo digo porque es la verdad - mis manos bajaron un poco más, para posicionarse en su cadera baja - así que aprovéchala linda, porque no se va a volver a repetir - acerqué mi rostro al suyo para besarla pero no lo hice, giré su cuerpo con mis manos y la dejé de frente a Brian, para que la viera mejor, luego ataqué su cuello con mi lengua.

Mi sangre hervía recorriendo cada centímetro de este cuerpo que ya no me pertenecía. El más alto de los dos estaba detrás de mí, podía sentir su respiración en mi cuello mientras lo besaba, incline la cabeza dejándolo libre. Respire hondo, y me deje llevar, él tenia control sobre mi, cuando el segundo chico se aproximó seductoramente comenzó a besar mis hombros deslizando suavemente los tirantes del vestido que no permanecería por mucho tiempo mas en su lugar, sentí la piel de su mano rozando delicadamente mi muslo. Y en mi último momento de lucidez pregunte a los dos chicos esculturales que me tenían rodeada con lujuria entre sus brazos – me gustaría… saber el nombre de tan atractivos seres que están ante mi…- nuestras miradas se cruzaron nuevamente y acercando nuestros cuerpos me susurró al oído ….

-Nena, el nombre es lo de menos -le reiteré al oído- La noche de hoy hasta olvidarás el tuyo y no te importará, tendrás tu mente, y tu cuerpo ocupados en cosas más interesantes - teminé posando mis manos en sus senos y los masajeé a placer mientras regresaba a su cuello para darle un par de mordiscos. Brian por su parte seguía entretenido con los muslos de la chica y con sus labios, arremetiendo contra ellos de una manera tan cachonda que me puso los cabellos de punta; yo conocía el poder de sus besos y sabía a la perfección que la chica estaba ya no estaba en tierrra, sino en otro planeta llamado sexy city.

-Kinney, no vayas a matarla de placer sin haber comenzado el juego... la noche es larga, contrólate ... que yo también quiero mi parte.

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La musica de la disco comenzó a sonar más fuerte y los vidrios de cristal comenzaron a moverse al ritmo. Mientras Brian y Mikaella seguían besándose yo me separé un tanto para sacarme la camisa, pues el calor corporal comenzaba a hacerse notoria y lo menos que quería sentir en mi cuerpo era una molesta prenda de vestir. Comencé a bailar, recordando aquellas noches en Budapest, cuando me escapaba de casa por las noches; aquel bar sólo para chicas...
Brian levantó a Mikaella, y entonces yo me aproximé hacia a ellos sin dejar de bailar, jalé a Kinney de la corbata y lo besé por un largo rato mientras él terminaba de sacarle el vestido a la chica, luego me coloqué a sus espaldas, para desabotonarle la camisa, pegándome a su cuerpo al ritmo sensual de la música de la pista.