Un dia en el Spa con alguien peculiar

Despuès de esa clase en la universidad, estaba enojada, -"Humanos, estupidos humanos"- Me venia repitiendo mil veces y gritando dentro de la limosina en plena quinta avenida, el chofer solo reìa y yo le enseñada los colmillos de vez en cuando pero el era de confianza asì que no me lo podìa comer, no aùn, baje de la limosina asotando la puerta y subì por los elevadores, queria ver a Gabriel, que me dieran uno de esos tratos especiales, al salir de el elevador, observe a un guapo joven, aspire su aroma, y reconoci rapidamente su especie, el peleaba con la estupida secretaria que tenia Gabriel, cuantas ganas tenia que arrancarle la cabeza, camine de manera firme, coqueta, sexy, como siempre lo hacìa y llegue al recibidor.
-"Quiero el cuarto especial y el dìa entero solo para mis tratos"- La muchacha me miro de manera retadota diciendo señorita no esta disponible, asote la mesa -" Tu no eres quien para decir si el dìa esta o no disponible para mi, es de mi hermano lo olvidas"- Yo sabia que teniamos cuartos apartes para los tratamientos especiales, pero la celosa de la secretaria no queria darmelos, el joven sonrio ante mi comportamiento.
-"Pero que hace este guapo muchacho esperando aqui?"- Voltee a ver a la secretaria, enarque una ceja y hable de manera dulce, ella sabia que mi tono de voz dulce era màs peligrosa. -" Pones una cama de masaje especial a lado de la mia para el joven, sin peros" Lo mire de manera coqueta camine, mientras el me observaba y le hice una seña con mis dedos para que me siguiera...

Pues claro que era un rostro familiar, siempre saliamos en las portadas de cualquier revista o periodico importante en New York y el mundo, pero creo que el se referia a algo diferente. Cuadno llegamos al final del pasillo nos esperaban los dos mejores masajistas del lugar, yo siempre queria lo mejor, si no hacian un gran alboroto que hasta Gabriel mandaba a llamar y regañar a sus empleados...
Extendì la mano para presentarme . -" Me llamo Olivia Covenan, encantada de conocer joven?"- Brian se metio a uno de los cuartitos para cambiarse mientras yo me cambiaba en plena habitaciòn, la verdad se lo que tengo, y no me averguenzo, al contrario me gusta poner a todos nervioso a mi alrededor...

-" Espero que el trato de la estupida secretaria no allà hecho pensar mal sobre el lugar de mi hermano"- Sonrio al salir de aquel cuarto y hablar conmigo

Observe de pies a cabeza al chico, no por que quisiera molestarlo o criticarlo, pero mi hermana Tatiana mucho tiempo estuvo sin salir de casa y no me la imaginaba que conociera tan rapido personas pero me alegraba mucho por ella. -"Bueno al menos mi hermana tiene buenos gustos al conocer personas"- Le guiñe un ojo de manera complice.
Me quite la bata que nos acababan de dar y me deje caer en la camilla era necesario un poco de atenciòn a mi cuerpo, aparte de la obvia, sonrei ante mis pensamientos un poco lujuriosos.

-"Cuenteme Kinney a que se dedica?"- Al menos si lo deje pasar en mi cuarto especial debiamos conocernos un poco màs.

Sonreì complacida. -" Al menos sabes reconocer lo que es bueno lindo, lo evidente"- El masaje empezo tal como me gustaba con esos olores tan deliciosos, aveces me hacian alguno de otro especial con sangre, cosas de la casa, nadie se preguntaba por que pero lo terminaban hacìendo.
Senti como de un cuerpo brotaba cierto calor y olor, tal vez el muchacho que estaba a mi lado recibiendo el masaje tenia algun pensamiento delicioso conmigo, eso asìa màs relajante y emocionante el masaje.

-"Algunas veces ayudo con la empresa de la famillia, puedo lograr no se por que que acepten nuestras propuestas, estudio, y tambièn participo en modelaje cuando me lo solicitan y veo que es interesante la propuesta, ya sabes no cualquier cosa, y pues las revistar y medios de comunicaciòn de la ciudad que siempre busca tener exclusividad de la familia, pero si quiero no puedo hacer nada, el dinero es lo de menos..."-

Volteè a ver de reojo tenia buen fisico, tal vez de aqui saldria algo interesante...

Cambiamos de posiciòn y el chico volteo a verme, me gustaba siempre que me dieran alagos, cuando termino ese tratamiento me enrolle en la toalla baje de la camilla, me puse las pantunflas especiales del lugar y camine para el pequeño jardìn mientras el joven me seguia y nos sentamos en unas bancas esperando a que el siguiente tratamiento estuviera listo.
-"Pues cuando quieras a una mujer hermosa, con clase y muy solicitada en esta ciudad para tus negocios solo llamame"-
El chico sonrio y asintio. -" Puede que hoy te deje tomarme una foto de manera personal"- Le guiñe un ojo, el sonrio màs al notal que no era una chica hipocrita que ocultaba lo que deseaba como muchas de las demàs, me pare del asiento y me acerque a el mordi su oreja de manera juguetona y le di un beso a mitad de labio. -"Tenemos que divernos no es asì"-
Se quedo sorprendido sin decir nada y yo camine cuando el muchacho salio a avisarnos que el tratamiento ya estaba listo...

Los aromas de este lugar eran demasiado relajantes y deliciosos, no se comparaban con la de algùn sufrido humano y vampiro tratando de escapar y perdiendo su vida al ser mi cena, pero era delicioso, deje que mi cuerpo se relajara, me gustaba tener la mejor atenciòn de todos los lugares a los que recurria. -"Amas el lugar o sera por que es la màs hermosa de las compañias la que esta contigo"- Los dos reimos ante el comentario y seguimos un rato callados recibiendo aquel delicioso tratamiento al estilo Covenan

Le pedì a uno de los encargados unas de mis bebidas especiales, ellos sabian a lo que me referia, pero nunca entendian que era no se les permitia tratar de averiguar o preguntar solo la traian. -"Usted desea algo caballero?"- Mande al joven a que le tomara la orden a mi acompañante....

Brindamos por algo, en realidad no sabia por que tal vez por mi belleza, solte una risita, habìa terminado la parte de la aromaterapida, me levante de el asiento en donde estaba entre al cuartito que estaba adelante y me puse un pequeño boxer feminimo y un brasier, sali del cuartito sin la bata que nos habìan dado, me fastidiaba tenerla encima de mi, no me daba pena mi cuerpo al contrario me gustaba mostrar lo que tenia y sabia que era algo hermoso...

Me parè enfrente del joven Brian el estaba sentado aùn en su lugar con los ojos cerrados... -"Brian, no creeras que me dejaras esperando el siguiente masaje solo por que se te ocurre tratar de dormir un rato, es de mal gusto hacer eso y màs si soy yo"- El chico sonrio de manera coqueta y se paro enfrente de mi, solo a unos centimetros de mi rostro...

El chico al menos era arriesgado, me gustaban las presas que se arriesgaban a adquirir las mejores cosas de la vida, y una de esas soy yo, tal vez si sangre tendria un mejor sabor, que divertido, muchas cosas las veìa como cena, la verdad eso aveces era demasiado divertido, ya que planeaba muchas cosas a la vez...
Cuando entramos al siguiente tratamiento no pude evitar mirar a Brian ya que se veìa demasiado gracioso soportando el calor de esas piedras, me miro y sonreimos de manera burlona por encontrar nuestras miradas...
Me releje, y me puse a tratar de dormir un poco, era tan relajante, esperaba que mi hermano viniera a darme el punto de vista sobre los tratamientos que estaba tomando el tenia tan buen gusto...