Primer día en Manhattan

Estaba cansada del viaje, de los paseos por Manhattan, de buscar un lugar donde dormir…al fin encontré un hotel, menos mal.
Pedí una habitación para tres días, no estaba segura de cuánto tiempo iba a tardar en encontrar una casa.
Entré en mi habitación, ni siquiera me molesté en abrir mi bolso de viaje, me tumbé en mi cama repasando en mi mente todas las cosas que habían pasado durante el día, primero mi perdida de equipaje por parte del aeropuerto, mañana tendría que comprar ropa después del trabajo, eso era otro tema, ¡mi trabajo! El primer día aquí y ya tenía trabajo, no me lo podía creer, estaba tan feliz…y deseando de que llegara el día siguiente para comenzar con mi trabajo. Me acosté dispuesta a dormir, y puse el despertador en mi móvil, no quería llegar tarde el primer día de trabajo.